Las tecnologías basadas en la inteligencia artificial (IA) se consideraban poco menos que «ciencia-ficción» no hace mucho tiempo. Pero ahora están demostrando ser una herramienta efectiva que contribuye a combatir la pandemia causada por el coronavirus.
Desde la farmacología, la atención médica y hospitalaria hasta la monitorización y control de espacios públicos en las empresas, lo cierto es que se ha desarrollado una amplia gama de tecnologías de IA para predecir, explicar y gestionar los diferentes escenarios causados por la crisis sanitaria. Sin olvidar el ámbito del análisis estadístico de datos, aplicable a muchos más sectores, y en el que ayudan a procesar y entregar resultados.
Centros de salud y hospitales
Las instalaciones de atención médica están desde el principio en la primera línea para combatir el brote. Y en su caso, las tecnologías de IA mejoran la eficiencia y la precisión de sus operaciones.
Un ejemplo de reciente aplicación es un sistema de monitoreo que combina sensores infrarrojos para la detección de temperatura con inteligencia artificial, para detectar el uso de mascarillas en la entrada del hospital. La solución notifica a las autoridades del centro de salud o del hospital sobre cualquier anormalidad de la temperatura corporal o visitantes que no usan máscaras.
También los algoritmos adicionales de aprendizaje automático e IA permiten diagnosticar y personalizar la atención al paciente y los planes de seguimiento para obtener mejores resultados. Esto, unido a las comunicaciones en tiempo real, hacen más sencillo el registrar y compartir información del paciente, lo que supone mayor eficiencia y ahorro de tiempo para controles regulares.
Centros de investigación y desarrollo
Se están incorporando algoritmos de IA en instituciones de investigación y centros de desarrollo en todo el mundo, con el objetivo de abordar problemas específicos que han surgido como resultado de la pandemia. Los productos y soluciones que han resultado de estos esfuerzos tienen el potencial de predecir efectivamente el próximo brote de infección, detectar y detener la propagación del virus.
Por ejemplo, un software desarrollado en Taiwán por AI Labs utiliza el aprendizaje profundo para detectar el coronavirus en las radiografías de tórax de un paciente. Así, se alerta a los médicos si se descubre que la prueba presenta una neumonía o el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, reduciendo el tiempo para el diagnóstico de semanas a minutos. Otros laboratorios de investigación están trabajando para desarrollar un modelo de predicción con el que reducir la cantidad de infecciones en una población.
Espacios públicos en empresas
Las empresas se están adaptando rápidamente a la «nueva normalidad», gracias a soluciones innovadoras como los sistemas de monitorización y control de la temperatura. Ejemplo de esto son los quioscos interactivos que combinan el control de la temperatura corporal y el control de acceso en un solo dispositivo, para proteger cualquier tipo de entorno del COVID-19, en beneficio tanto de clientes como empleados.
Esta nueva generación de terminales de control de acceso utiliza tecnologías de inteligencia artificial para identificar a las personas infectadas, como sensores de detección de mascarillas y de temperatura corporal. La solución de IA también involucra el aprendizaje automático, para mejorar la precisión de sus lecturas de temperatura con el tiempo.
Estas tecnologías impulsadas por inteligencia artificial se han demostrado como una respuesta oportuna y eficiente durante el brote de coronavirus, para que todo tipo de organizaciones y empresas desarrollen su actividad en un entorno seguro.
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